Porto

Cuando iba al colegio, todos mis profesores pensaban que era una estudiante disciplinada que hacía los deberes con tiempo, llevaba sus lecciones al día y nunca dejaba todo para última hora, cuando lo cierto era que estudiaba el día antes de los exámenes, hacía los deberes en el último momento posible y vivía en la última hora. Más o menos es lo que me pasa ahora de adulta con ciertas cosas y es lo que me ha pasado con el reto de lectura. Hice una lista de literaturas, otra de posibles lecturas y me encontré con que el día para publicar la primera entrega estaba al caer y aún no había leído nada que pudiese sumar a mi lista. Pero, como cuando era pequeña, el último día lo conseguí y ayer acabé de leer el primer libro de este reto de lectura. Un título menos de la lista: la literatura portuguesa puede ser tachada.

Cierto es que aunque Portugal es el país vecino (es el apellido que le acabamos poniendo siempre) y que es un país increíblemente próximo en muchas más cosas más allá de la geográfica, su literatura no es tan sencilla de encontrar en España. Siempre me ha sorprendido, por ejemplo, lo difícil que es comprar periódicos portugueses en España, aunque – por supuesto – tenemos un amplio abanico para escoger en periódicos importados de Reino Unido, Alemania o Francia. Ni siquiera en el Aeropuerto de Madrid es posible encontrar prensa portuguesa (o yo nunca lo conseguí siempre que la busqué). Un poco ocurre con la literatura en versión original. La sección de portugués en las grandes librerías es siempre ínfima en comparación con el francés y sobre todo con el inglés. Daros una vuelta por alguna Fnac (aunque debo confesar que para mí fue todavía más sorprendente la cara de sorpresa que le quedó al dependiente la vez que le pregunté si tenían algún libro en gallego) y lo comprobaréis.

En Madrid, La Central de Callao está bastante surtida de libros en portugués, tanto traducciones como en versión original. En Santiago de Compostela, desde donde escribo, la variedad de libros en versión original es incluso superior y es posible encontrar librerías especializadas (cuestión de proximidad lingüística).

anatomia dos martires joao tordoPara esta primera entrega del reto decidí, por tanto, empezar por la literatura portuguesa. Como el truco para hacer el reto aún más difícil es intentar leer siempre que se pueda en versión original, aposté por comprarme el libro en portugués y no una traducción. Y solo había una norma: Saramago estaba vetado (demasiado mainstream). A poder ser, me dije, que sea un best seller de masas. Así que me fui a una librería de Santiago (Follas Novas, había quedado al lado; aunque hay librerías con mayor fondo de literatura portuguesa en la ciudad) y me dediqué a observar la zona de lengua portuguesa esperando que el libro me escogiese a mí.

Y sí, sé que no es el mejor criterio (para las próximas lenguas os prometo esforzarme más por encontrar a un autor realmente representativo), pero ha funcionado.

Así el primer libro de este reto de lectura ha sido Anatomia dos Mártires, de João Tordo, que no está traducido al castellano (he usado la base de datos de la Biblioteca Nacional, donde debe depositarse un ejemplar de cada libro publicado en España para confirmarlo). El argumento es a priorio bastante seductor: un periodista prepotente, aunque no ha conseguido hacer mucha carrera a sus 30 y largos años, quiere impresionar a Raul Cinza, su editor, un periodista de la vieja escuela, antiguo izquierdista (de  esos que luchaban contra la dictadura), con uno de sus artículos. Tiene que escribir sobre la biografía de un hombre que se suicidó con la intención de ser mártir y hace un artículo sentencioso, pretencioso, sobre la naturaleza de los mártires, desde el suicida a Catarina Eufémia, un icono de la lucha contra el régimen de Salazar. Pero su artículo acaba teniendo un efecto bola de nieve en todos los protagonistas y el periodista, decidido a entender qué está pasando, se lanza a averiguar la verdad sobre la historia de Catarina Eufémia.

Una búsqueda en Google al salir de la librería me confirmó que Tordo es uno de los escritores jóvenes prometedores de la literatura portuguesa (y una de sus obras fue incluida en el decálogo de lecturas «imprescindibles» de Babelia para conocer a los autores portugueses nacidos en la década de la Revolución de los Claveles). Ha sido finalista en varios premios literarios, como el Fernando Namora o el Portugal Telecom (uno de los más valorados de literatura en portugués), y ha sido traducido a varios idiomas (aunque no al vecino castellano).

La novela captura el espíritu del Portugal que se enfrenta a la debacle financiera en 2008 (es muy interesante leer los pasajes que se centran en ese ambiente un poco fin-de-siècle (el propio narrador nos explica que es como estar viendo la decadencia de los años 20) en los que parecía que el mundo se estaba acabando y todos se dedicaban a consumir, a gastar, un poco apurar para quemar los últimos cartuchos. Aunque en realidad lo más importante de la novela no son los hechos, sino la interpretación de los mismos, el cómo interpretamos las verdades (lo cual nos lleva a pensar y a reflexionar sobre lo que sabemos y lo que nos han hecho, por así decirlo, saber). En resumen, una novela muy interesante y una muy buena manera de empezar este reto de lectura. 

Puedes saber de qué va el reto de lectura en nuestras reglas del juego y seguir las actualizaciones en nuestro diario de a bordo

No dudes en proponer libros para las próximas lecturas. En los próximos días publicaremos un reportaje sobre la literatura portuguesa para que tengáis más libros que escoger