Una de las historias casi fundamentales de la Navidad es A Christmas Carol, el cuento de Charles Dickens que se ha convertido en una especie de universal para estas fechas (y que es uno más en realidad de sus Cuentos de Navidad
) y que sigue la historia de un hombre miserable al que unos fantasmas tienen mucho que decir. Fue muy popular en su momento y siguió siéndolo tras la muerte del escritor. Y uno de los lugares en los que se notó su popularidad fue en el cine: desde el principio de los tiempos cinematográficos, la historia fue convertida en película. Cuento de Navidad se convirtió así en una película navideña para muchos espectadores de muchas épocas.
Y ahora que estamos en plenas fechas navideñas, nada mejor que recuperar la primera de las versiones que se hicieron de esta historia en el cine. Scrooge, or, Marley’s Ghost es la primera adaptación al cine de la historia, dirigida por Walter R. Booth en 1901 y por supuesto en blanco y negro y en modo mudo. La historia está protagonizada, claro está, por Ebeneezer Scrooge, que debe enfrentarse al fantasma de su antiguo socio, Marley, y descubrir las Navidades pasadas, presentes y futuras.
De forma increible han conseguido concentrar la historia en menos de cuatro minutos. El fantasma es un hombre con una sábana, algo que hoy en día nos parece entrañable pero que seguro que fascinó a los espectadores de su momento.
Y si la película sabe a poco siempre queda tiempo para echar mano de la obra del propio Dickens en alguna edición bonita (esta, Canción de Navidad, es de Kalandraka)
Sin duda, hoy esta ingenuidad estética nos puede parecer quizá ridícula (a mí no me lo parece), o quizá, como bien dices, entrañable. En todo caso, Cuento de Navidad es una historia que apetece leer y releer. Yo he tomado la costumbre de volver a leerlo cada año para estas fechas. Tengo una edición muy sencilla y manejable que ayuda mucho a la hora de llevárselo a la cama y practicar -permítaseme el vulgar anglicismo y el televisivo símil-, el «edredoning» literario y navideño. Ojalá muchos lectores vuelvan a descubrir la magia de esta historia en estas próximas y cordiales jornadas de la Navidad.