El mapa del tiempo es estos días una acumulación de manchas rojas. La ola de calor que azota la Península Ibérica está sometiendo a algunos pobres desafortunados a temperaturas de 40 grados y a situaciones de calor desesperado. Pero además de beber mucha agua, no salir a la calle en las horas de máximas temperaturas y llevar un buen abanico siempre consigo, hay más cosas que hay que saber sobre el calor. El calor es material para encontrar inspiración literaria y son unas cuantas las novelas que se inspiran en olas de calor.
Insolación, de Emilia Pardo Bazán. Asís, una noble gallega que vive en Madrid, viuda, con la vida acomodada de las buenas mujeres decimonónicas, sufre un golpe de calor en una feria y se deja atrapar por la labia de Diego Pacheco, un apuesto señorito andaluz más joven que ella. Y claro, el calor la sangre altera… Podéis imaginaros lo escandalosa que la historia fue en su momento.
El extranjero, de Albert Camus. El calor también hace que el protagonista de Camus pierda la cabeza, aunque en esta ocasión de una forma mucho más dramática. Un día de calor, un hombre mata a otro en una playa del norte de África.
El maestro y Margarita, de Mijail Bulgakov. Como señalaban en la redacción de Librópatas, «si 30 grados en un día de primavera en Moscú no es una ola de calor»… Así que esta novela, uno de los clásicos del XX, tiene que ir en la lista. Satán aparece en Moscú en una semana de 1930 y lo hace en la hora de más calor de una tarde de primavera. Y ya sabemos que cuando Satán aparece, las cosas acaban viéndose afectadas.
Expiación, de Ian McEwan. Una fascinante novela – también ambientada en los años 30 – en la que las diferentes partes encajan como muñecas rusas. Todo empieza en un caluroso día, el día más caluroso del verano, cuando Cecilia Tallis sale de una fuente a la que se le ha caído un jarrón, su hermana Briony intenta escribir su gran obra de teatro y Robbie Turner, el hijo de la doncella, observa a Cecilia. Pero todo esto es el punto de partida y casi es mejor no seguir contando nada, so pena de hacer un brutal spoiler.
Instrucciones para una ola de calor, de Maggie O’Farrell. Estamos en Londres, en el verano de 1976. La ciudad está sumida en una ola de calor. Un jubilado desaparece y su familia se lanza a buscarlo por la ciudad, aunque la ola de calor hará que se comporten de forma extraña.
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