‘Londres después de medianoche’ contiene todos los ingredientes para conseguir que el lector se entretenga y enganche desde la primera página: suspense, misterio, una búsqueda que parece imposible y un protagonista/narrador cuyo pasado también esconde enigmas sin resolver.
Que a un exagente del FBI ya jubilado se le presente la oportunidad de enfrentarse a un caso que a todas luces parece destinado al fracaso absoluto y que este acepte el reto no es, desde luego, una premisa de partida que resulte original al lector. La cosa cambia sustancialmente si lo que nuestro bienintencionado protagonista debe recuperar es la copia perdida (y supuestamente desaparecida en un incendio) de uno de los filmes más buscados de la historia del cine: ‘Londres después de medianoche’. Una película real. Una película de vampiros protagonizada por Lon Chaney, uno de los actores más relevantes del cine mudo, junto con Bela Lugosi o Boris Karloff.
Tan real como estos actores que han encarnado a los personajes del terror clásico es Forrest Ackerman, el apasionado de la ciencia ficción y coleccionista, que encarga al agente Mc Kenzie la tarea de recuperar (como sea) el filme. La búsqueda llevará a Mc Kenzie a iniciar un recorrido cargado de dificultades que le obligará a viajar desde los Ángeles a México (pasando por Texas), para acabar en medio de un escenario que ni en sus sueños más locos hubiera podido imaginar.
Actrices que un día fueron auténticas estrellas del cine mudo y que han envejecido con mejor o peor suerte (en una mansión o en un deprimente asilo en medio de la nada), un multimillonario obsesionado con los enigmas, un gigante de más de dos metros… son algunos de los personajes con los que deberá hablar y hasta enfrentarse Mc Kenzie para ir acercándose al paradero (si es que existe) de la preciada película. Porque, aunque todo el mundo se lo desaconseje, el agente está empeñado en continuar con sus investigaciones. Parecen no importarle que aquellos que la buscan sufren terribles consecuencias. ¿Será Mc Kenzie una de las víctimas del filme?
‘Londres después de medianoche’ mezcla con acierto la ficción con personajes tan reales que solo con un clic podemos saciar nuestra curiosidad. El que fuera el primer director del FBI, J. Edgar Hoover, aparece con frecuencia entre las páginas del libro, ya que nuestro agente era, ahí es nada, su hombre de confianza. Los recuerdos de su trayectoria en la institución y la particular relación entre ambos hombres están muy presentes en el libro, ofreciendo al lector un bosquejo de una de las personalidades con más poder de la historia de Estados Unidos. Pero, ‘Londres después de medianoche’ es también, un homenaje al cine de terror y al cine en general, así como a todos aquellos que lo hicieron posible.
Con todos estos elementos, el autor construye una novela que engancha, entretiene e interesa y nos obliga a una reflexión sobre el valor de lo perdido o de aquello que ha dejado de existir.
Augusto Cruz (México 1971) colabora en las revistas Etiqueta Negra y La Nave, ha cursado talleres de guion cinematográfico en México y UCLA y el Máster en Dirección del Sindicato de Actores de México. ‘Londres después de medianoche’ es su primera novela, para la cual ha llevado a cabo un trabajo de investigación amplio y concienzudo en el que la búsqueda de referencias literarias y cinematográficas ha sido esencial. Seix Barral publica el texto en su Biblioteca Breve.